martes, 19 de julio de 2011

"Todo es una ilusión"


La noche se viste de seda,
y la oscuridad se hace eterna.
Estas tan lejos, y yo solo te escribo,
cartas de amor.
Epístolas abandonadas
en un cajón, donde sepulto mi querer.
Raído corazón que prefiere ocultar su verdad
en una soledad conocida,
intimidad desmedida, la pasión se enfría,
el amor que tengo para dar,
es traicionado por mil razones para dudar…

Miro la gente pasar,
todos en sus vidas indiferentes,
lejos uno de los otros.
Tan cerca y tan distantes
una existencia insuficiente.
Vamos tú y yo de la mano
pero solo es un momento de ilusión.
Tú y yo somos gotas de aguas, tan diferentes
atraídos por un magnetismo de maldición.
Bendita herejía es el amor.

No puedo ni quiero, evitar la burda inquisición,
de aquellos que condenan
mi tragedia romántica.
Ilusión aromática,
prohibida en tu razón
y mientras más me es prohibido,
más amor me es permitido.


Descubro en las noches de seda blanca,
amaneceres de ardiente pasión,
tantas letras banales he escrito
y tan pocas he vivido.
Mis versos diluidos entre sabanas,
mi corazón crucifixiado por tus lágrimas,
escribe la frase infame de mi sufrir,
amor tengo que partir.

Pero respiro profundo, contengo el aliento
en tu deseo, mujer de seda
dejare mis secretos.
Enmudeceré mis miedos, no diré nada,
podría entregarme por completo
a tu delirio, que quema y consume,
las dudas que tenga.

Decidamos de la mano
tú y yo,
dejar este mundo material,
vivir una inspiración sicótica de amor.
Pero cuesta dar un paso fatal,
mejor es respirar profundo
en la penumbra…


La casa a oscuras
silencio en la sala.
Tu risa, tus palabras
se han vuelto solo
un suspiro de silencio.
Pero de nada sirve
mirar el pasado,
querer cambiar lo obrado.

El amor nunca será suficiente,
luchar con la vida,
con los defectos.
Fantasías o mentiras,
sueños que inventa el corazón.
Llorar como un hombre,
solo en silencio,
mi penar…

Ya no soy un niño,
no puedo correr, a los brazos
de mi madre,
buscando abrigo.
Que se puede hacer
la vida es como es,
ahora soy un hombre,
un adulto,
un niño rumbo
a la tercera edad.

No hay frio en la tierra,
las reglas solo se inventaron,
para los débiles,
para someter
a los temerosos de vivir.
El mundo no es
lo que el ojo ve,
el azul es gris y
el amarillo es rojo.
La montaña es de barro
y el mar es arena del desierto.
Todo se ve,
como lo queramos ver.
La vida es una ilusión.