En el lecho de mi muerte,
soñare un prado verde.
Que tomado de tu mano,
bajo el sol
envuelto en sudor,
recorro con mis pasos cansados.
Pero ya será tarde,
sentir tu mano
entre mis dedos,
una tibia tarde de verano.
Por que mis ojos ya gastados,
se cierran esta primavera.
Quedara en mi pasado
el sabor de tu mañana,
un futuro no disfrutado,
esos labios ardientes
esos besos que me he negado.
Quizás mi vida no valga mucho
mas, que un amor pasajero,
quizás lo que vestí de eterno
solo sean encajes etéreos,
vestigios de momentos.
Tu cuerpo entre mis brazos
no fue mas que una aventura,
tu boca en mi boca
un recuerdo que tortura.
Mujer,se que me amaste
y te amare en silencio.
Corazón que has olvidado
y me sigues latiendo en el pecho.
Nunca diré tu nombre
porque tu nombre es sacrilegio.
Mejor para mí son tus besos
en silencio,
en silencio el amor es eterno.
