-Toma, dale esto.
+¿A quien?
-Pues a mi mejor amiga, está allí sentada.
+De acuerdo.
+¡Hola! Te traigo una carta.
-¿Para mí? ¿Es tuya?
+Pues, se supone que debo decir que sí, pero no. Es de una persona que te quiere más que a nadie en el mundo.
-¿Mi madre?
+Tu mejor amiga.
¡Hola! ¿Qué tal? Yo bien. Ojalá me regalaran algo en San Valentín... Pero no va a ser el caso, así que me conformaré. Yo estoy pensando en hacerle una carta a mis mejores amigas, porque, ¿de qué sirve San Valentín? Se supone que es para las personas enamoradas. Y si tú quieres a una persona, aunque sea tu mejor amiga, pues se la das, y ya está.
Un compañero mío de clase, que le gusta una de mis mejores amigas, le va a hacer algo. Yo le estoy ayudando ja, ja, ja. Le he dicho que consiga una flor, y le haga una carta con un corazón o algo, y yo me encargaré de dársela. Seguro que le hace mucha ilusión. A mí, la única vez que me dieron algo en San Valentín fue en primero... ¡De primaria! ¡Con 6 años! El mejor amigo de este chico del que os hablo, me regaló una flor preciosa. Ojalá este año también me den una... Me haría muchísima ilusión.
¿Y vosotras? ¿Cómo lo vais a pasar? Belén ya sé lo que hace en la escuela, compran sobres y todo eso, y me parece una idea estupenda.
Bueno, besitos.
Bye~
