sábado, 26 de octubre de 2013

Me corto, soy bulímica, lloro y vomito, pero así quiero que sea mi vida


-Hola, ¿qué tal?
+Hola, bien.
-¿Y esos cortes?
+Me he arañado sin querer.
-Estás más delgada.
+Estuve mala.
-Tienes los ojos rojos. ¿Has estado llorando?
+No, es que tengo alergia al polen.
-Tienes las uñas muy descuidadas, y pareces tener la garganta irritada.
+Hace mucho que no me las pinto, y estoy un poco resfriada.
-¿Te apetece comer algo?
+No.
-Te cortas, eres bulímica, has estado llorando, y lo de las uñas, la garganta y no querer comer es de vomitar, ¿cierto?
+No quiero hablar contigo.
-Deja de vomitar y de cortarte.
+Déjame. Es mi vida, no la tuya.
-Me preocupo por ti.
+Estoy bien así.
-Come algo por mí, ¿vale?
+Sí...
-¿Me prometes que vas a intentar dejar de hacer todo eso?
+(Cruzando los dedos) Sí, te lo prometo.