Comencé a fumar en la niñez
y a beber a reglón seguido,
era campeón de las derrotas
e ídolo de la frustración.
Colgué mi traje de fracasado
el día que vi sus ojos almendrados
su sonrisa de tímida virtud
y su cuerpo de pecado.
Yo que era un delincuente
en teoría,
me deje apresar por sus caricias,
cual pilonero de medio tiempo,
le hice el amor en el sillón.
Yo ya tenia algo de camino,
ella salia de un cuento de hadas,
con su piel blanca como la nieve
y su mirada de bruja vengativa,
era todo lo que quería,
dormir con su piel cálida
y amanecer con ella en la otra vida.
Con ella a mi lado ya no era perdedor,
malos augurios nos fueron dados
cuando decidimos vivir a tiempo completo
y ciertamente malos ratos hemos pasado,
pero aun seguimos juntos por el camino.
No podemos decir que ha sido suerte,
el amor un rol a jugado,
somos distintos que duda cabe,
yo pienso y luego existo
y ella existe por siempre.
Mas no me puedo quejar
nada es perfecto en esta vida.
bueno nada era perfecto en nuestras vidas
hasta que decidimos compartirla...
