Amigo, ¿estás ahí?

No es necesario que respondas,
porque ya mi corazón me respondió,
el ya te conoce y sabe de tu presencia, de tu pensamiento
y de tu sentir.
Mírame con los ojos del alma que son los que conocen la bondad
y el amor...en ellos no hay engaño solo hay serenidad confianza, fe y paz.
Vuela como las gaviotas que serenas cruzan el espacio
... y acércate a mi.
Si estás triste te daré mi mano para que juntos caminemos
buscando la alegría y cuando la encontremos danzaremos felices...
Le diremos al tiempo que detenga su vuelo para hablar de mil cosas...
caminaremos juntos sin prisas, enfocando siempre la misma dirección.
Me verás a tu lado.
Si tropiezas allí estoy, te apoyarás en mí y verás
que muy pronto te podrás levantar.
Amigo yo sé que estas ahí , no es necesario que hables, también en tu silencio
te puedo comprender...yo escucho tus palabras que ya de tanto escucharlas
se han quedado en mi.
Los amigos son parte y pedazos de vida
que en un momento dado logramos encontrar;
¿dónde? no lo sabemos, ¿cuándo? es difícil pensar.
De pronto están ahí y parece que siempre los hemos conocido,
y se instalan serenos en nuestro corazón y caminan tan cerca
y aunque vivan muy lejos no hay distancia ni olvido
porque así es la amistad, cuidadosa y paciente, sincera
comprensiva, bondadosa y profunda.
¡Amigo! yo sé que estás ahí.

Nelly Guerrero

El arte de la danza

Ella era ella

Un torrente de ideas brincoteaba en su mente cuando una como de rayo le hizo darse cuenta que ella era ella.
Como si no se conociese, comenzó a observar toda aquella nueva y flamante presencia.
Posaba su vista en sus manos que con delicados movimientos le hacían conciente el hecho de saberse renaciendo.
Movía los tobillos en círculos y fue que un escalofrío le hizo suspirar inhalando hasta dejar plenos los pulmones, levantando los brazos y encarando las manos al cielo.

¿ De qué estaba hecha su piel cuando un arrebato de entusiasmo se dejaba notar en ella ?. ¿ Dónde podría ocultar el amor que aún conserva cuando el de él se ha esfumado ?.
Entonces se balancea en aquel columpio de apenas un trozo de madera. Empuja con sus piernas y se le alborota el cabello en rebeldía. Es que no solo su mundo interior protesta. El sol, la luna, el viento y la tierra le acompañan cuando se desgarra por los recuerdos que han perdido el último aliento de esperanza.

Pero se detiene el el breve instante cuando comprende el valor del tiempo y se aferra, se da cuenta que solo tiene un " ahora ".
Se abraza a sí misma para afirmarse en una cosa: se tiene a sí misma y es más fuerte de lo que pensaba.
Siente de nuevo el aire en sus manos aconchadas y abre los dedos dejando filtrar el atardecer que le traerá un mejor mañana.

Tere García Ahued.

CPE Etapa de Profundización.

Durante los días miércoles 12, jueves 13 y viernes 14 de noviembre, los docentes de las sedes Rural Cariongo y La Aurora cumpliremos con un Taller de Capacitación CPE Etapa de Profundización.

Los siguientes son los productos que debemos elaborar:

1- Ajuste del proyecto TEO (Tic Escuela Oportunidades), a partir de las observaciones y correcciones que haga llegar el equipo de formación.

2- Producción de un artículo sobre el proyecto.

3- Búsqueda, clasificación y entrega de material para un Web Site.

¿Hablamos de tí?

No, no voy a hablar de ti personalmente. Necesitaría un balcón amplio con buenas vistas al mar. Como no lo tengo, intento ordenar las fichas del dominó, para que ninguna se quede fuera de la caja, de manera que cuando juegue con mi nieto no falte alguna. De todas maneras da igual como las ordene. Cuando juego con él, siempre me gana. La derrota por mi parte está garantizada. Mi victoria es verlo saltando de alegría, gritando “campeón, campeón”.

¿Para qué, pues, hablar de ti? Mejor hablemos de los dolores no del parto sino del paro. Cada vez más son este país, no, más bien en este mundo. Hace estar a muchos en vigilia. Es la realidad de cada día. Para hablar de ti necesitaría versos que no sé componer. Mejor hablar de sueños militares, de aquellos que van a otras tierras dicen que en misión humanitaria, y vuelven dormidos para siempre a sus casas. Mejor hablar de Bush, que se metió en Afganistán y en Irak, y llevamos años, y llevamos muertos, y llevamos descalabros y no ha solucionado nada. Mejor hablar de Obama que lo tiene difícil para comenzar a hacer algún que otro milagro. Siempre, sin darnos cuenta, terminamos haciendo referencia al Tío Sam, a quien deseo se libre de gorilas esperpénticos que enseñando sus fauces no le han dado buenos consejos.

No, no quiero hablar de ti, porque no soy poeta. Y así, quejándome de ello, he hablado de otras cosas que no son poemas, o sí. Son el poema de cada día.

2º Concurso Cuento Ecológico (3)

Este es uno de los tres cuentos participantes:

La voz del agua

En una vereda llamada Monteadentro, muy bonita por sus montañas verdes y el agua azul como el cielo sucedió una historia…

Allá nace el río Pamplonita, al principio son unas gotas muy bonitas que forman hilos brillantes.

Muchos hilos se unen y se vuelven chorros que corren por en medio del musgo y de las pequeñas matas que crecen en esos cerros.

Cerca al río que se va formando vive gente.

Un día una niña llamada Máryuri estaba lavando su ropa a la orilla del río y escuchó una voz que le decía:

-¡Hola!-

Se asustó mucho y miró para todas partes.

Luego se dio cuenta que era el agua quien le estaba hablando.

La niña le dijo:

-¿Quién eres tú?

-Yo soy el agua. Sé que para ti es muy extraño que el agua hable.

Entonces Máryuri salió corriendo a contarle a Pablo, el pajarraco, y a la codorniz Beatriz que eran sus amigos, lo que le había pasado.

Les dijo que el agua había hablado con ella y les contó cómo era su voz: dulce y agradable.

Máryuri se fue para su casa y al pasar por el río escuchó esa voz que le decía:

-No me contamines, porque eso me duele. Por favor, no me contamines.
Soy el agua que les da vida a las personas- y guardó silencio.

Al otro día fue y les contó a sus amigos y ellos se sorprendieron.

Máryuri les dijo:

-Debemos hacer algo para que la gente no contamine más el río Pamplonita.

Entonces, dijeron:

-¿Por qué no hacemos una campaña de limpieza y nos concientizamos todos de no volver a contaminar el río Pamplonita? Así podemos avisarles a las empresas ambientales y a todas las personas para que nos ayuden a hacer la campaña en beneficio de nuestro río.

Hicieron la campaña y así fueron más felices.

Una semana después la niña fue al río y el agua habló:

-Muchas gracias Máryuri por hacer que no me contaminen más. Gracias a ti y a tus amigos.

Y así fue como los habitantes de la vereda no volvieron a contaminar el hermoso río Pamplonita.

Máryuri Esperanza Portilla Vera
11 años
Quinto Nivel
Normal Superior Pamplona, Sede Rural Cariongo

2º Concurso Cuento Ecológico (2)

Este es uno de los tres cuentos participantes.

El secreto de Coral y Arturo

Erase una vez una pequeña trucha llamada Coral que vivía en un pozo del río Pamplonita.

A ella le gustaba conversar con el río. Y también tenía un amigo que se llamaba Arturo, era un copetón muy comprensivo con Coral después de la muerte de sus padres.

Pero el río Pamplonita estaba muy debilitado por todo lo que le hacían los seres humanos: echarle mugre, contaminándolo, arrojándole líquidos, jabón y otras sustancias que le botaban los campesinos de las veredas cercanas que le hacían mucho daño y le costaba mucho recuperarse.

Coral y Arturo quisieron ayudarlo. Fueron a donde la señora Elisa que era la trucha mayor para que les señalara el camino indicado.

La señora trucha les dijo:

-Los seres humanos los podrán ayudar-

-¿Pero cómo?

La señora Elisa les dijo:

-Debo tener por ahí una poción para que ustedes se vuelvan seres humanos-

Coral le dijo a su amigo:

-Oye, Arturo, ¿tú vendrías conmigo a la vereda?

Arturo le contestó:

-Claro que sí, pero ¿cómo lo haremos?

-La señora trucha nos ayudará-

Un día después fueron Arturo y Coral y encontraron a la señora Elisa. Ella les dio una poción a cada uno. La trucha mayor les dijo que el efecto de la poción nada más duraría una semana. Ellos le dijeron:

-¡Pero ese tiempo es muy poquito para salvar al río Pamplonita!

-Así es- dijo Coral.

Sin embargo, salieron del agua y se transformó Coral como una estrella y de repente se volvió una mujer y Arturo, el copetón, se volvió lucero y luego se volvió todo un hombre.

En el camino se encontraron con unos niños de la escuela Cariongo y ellos quisieron ayudar a Coral y a Arturo luego de escuchar su explicación.

Entonces, empezaron a hacer carteles para buscar salvar al río Pamplonita.

Dos muchachos llamados Eduardo y Jorge quisieron ayudarlos. Pero el río seguía estando aún más debilitado.

Ellos y los estudiantes de la Escuela Cariongo de los niveles cuarto y quinto hicieron campañas, pero la gente no les quería ayudar y como no pudieron ellos mismos empezaron y alguna gente les quiso colaborar pero mucha otra no lo quiso hacer.

Empezaron a ir de casa en casa diciendo que el río les da de comer, les da agua para lavar la ropa, para bañarse. Y preguntaban que entonces por qué le hacían daño y así la gente pudo comprender y se vinculó a las campañas y el río Pamplonita empezó a ser recuperado.

Se enriqueció el río gracias a Coral y a Arturo y como a ellos les faltaba un día para volverse trucha y copetón, entonces, Coral fue a donde la trucha mayor y le dijo que les diera otras pociones para que el efecto les durara otra semana y se pudieran despedir de los niños de la vereda.

Ella les dijo:

-Pero sólo la deben tomar a la hora que se les acabe el efecto anterior y así podrán ser otra vez seres humanos.

Ellos lo hicieron tal cual como se lo dijo la trucha mayor y en la semana se pudieron despedir de sus amigos y regresaron al río como trucha y copetón y vivieron felices por haber salvado el río Pamplonita.

Arcelia Díaz Leal
11 años
Quinto Nivel
Normal Superior Pamplona, Sede Rural Cariongo.