martes, 16 de septiembre de 2008

Fiesta mexicana




Fiesta mexicana.

La noche del 15 de septiembre celebramos en México el día de La independencia. Es una fiesta nacional que se prepara con antelación en Palacios de Gobierno de Municipios y Estados. Me escribe una gran amiga como respuesta a un mensaje sobre el tema, que sin ser pesimista, no encuentra motivos para que un país celebre cuando siguen existiendo infinitos problemas sociales. Tiene mucha razón, sin embargo, creo que es la forma como los mexicanos olvidamos por una noche esta realidad.

Un grupo de vecinos me invitó a cenar con ellos, entonces se vuelve " la noche de festejo ". La casa decorada dentro y fuera con motivos patrios y el menú típico de la cocina nacional: pozole, tacos, enchiladas, botanas picantes, frijoles negros refritos, nopales, chiles en nogada, pambazos, chilaquiles y un basto menú acompañado de aguas de tamarindo y horchata, cervezas y tequila.

Sombreros, rebozos, silbatos, maracas, rehiletes al viento. Niños jugando fuera de casa con las mejillas pintadas en franjas tricolores, aún sin saber el significado de la fiesta, pero degustando como adultos los platillos que ya desde pequeños aprenden a comer con sabores picantes.

El ánimo se transforma, nos volvemos nacionalistas puros que de verdad sentimos orgullo por este país, que aunque aceptando el comentario de mi amiga sobre que no existen motivos para celebrar, quiero pensar que el sentir del festejo es por la verdadera esencia de una nación. Esto no son las desigualdades sociales, el narcotráfico, los problemas políticos, migratorios y una gran lista de ellos, sino lo que sí nos llena de alegría es que la gente es noble, cree todavía. Que estamos llenos de preciosas costas, de abundantes recursos naturales, que existe una arraigada fe religiosa, que se promueven las tradiciones, que se honra la memoria de los Héroes Nacionales y que aún la familia sigue siendo la base de la sociedad, que existen mujeres exitosas que combinan su trabajo en casa con el profesional.

Todo esto y más se vive en cada grupo que se reúne para convivir, para gritar en un " Viva México ", que sigue creyendo en el país aunque se amanezca al día siguiente con las realidades en la puerta, en los diarios o en la rezaca del tequila que hizo olvidar las penas. Esto es México, mucho más es México, como lo son todos y cada uno de los países que sienten orgullo por ser nacionales, porque este es un valor que cada día se pierde, sobretodo la juventud que proclaman ser ciudadanos del mundo o simplemente rechazan por las razones que sean, las tradiciones y la patria que les vió nacer.

Tere García Ahued.