martes, 11 de agosto de 2009


esta de moda, se olle venir, hay que acordes más preciados, más hermosos...hay, si, soy el niño de la guitarra con un clavel y su música, con mi voz bajita, con mis sueños al hombro, con un camino que recién comienza, con una nota en re que estremece, con la escala del siglo persiguiendo la memoria, con la increible estupides, con mis manos heridas, con la frente marchita, con el alma pendiente y las palabras acumuladas, oraciones vacias, llenas de vida, oraciones complejas, faltas de ingenio.....que estupides más grande. ¿Puedo pedir un favor?, por favor.

que tremenda locura, que increible locura.